El uso de armas Taser puede conducir a la muerte - un resultado trágico, permanente e irreversible con graves implicaciones constitucionales.
Echemos un vistazo a la más reciente historia de terror. La semana pasada, la policía de Florida mató –aunque haya sido sin querer- a un joven artista de 18 años de edad, con un futuro prometedor al acorralarlo y dispararle en el pecho con una pistola Taser.
En ese momento, Israel Hernández-Llach [colombiano], estaba armado con nada más que una lata de pintura en aerosol. Él era de un metro sesenta de estatura y pesaba 68 kilogramos. Estaba firmando la pared de un McDonalds abandonado con la letra "R" a las 5 am cuando la policía lo persiguió, lo electrificó, y lo vio morir.